Título y UEFA, en juego

Aún con la resaca del sensacional tanto que Lionel Messi brindó ayer en la primera semifinal de la Copa, esta noche, a partir de las 21.00 HEC, tendrá lugar la segunda en el estadio de Riazor. El RC Deportivo La Coruña se verá las caras con el Sevilla FC, único conjunto español vivo en tres torneos. No es de extrañar que los andaluces comiencen a resentirse en este final de campaña, circunstancia que desean aprovechar los gallegos. Y es que, si se cumplen los pronósticos, de meterse en la final tendrían virtualmente asegurada una plaza en la Copa de la UEFA 2007/08.

“Respetamos mucho al Sevilla”
Joaquín Caparrós sorprendió al dar la lista de convocados dos días antes de la cita. En ella no se encuentran hombres como Riki, Iago Iglesias, Fabián Estoyanoff o Joan Verdú. Asimismo, recupera a Javier Arizmendi y Cristian Hidalgo, que junto con el meta Gustavo Munúa tienen asegurada la titularidad. Riazor registrará una magnífica entrada, gracias en buena parte a la iniciativa del club de regalar una entrada a cada socio. El técnico utrerano espera que la hinchada aúpe a los suyos a dar la sorpresa: “Atacaremos cuando haya que atacar y defenderemos cuando haya que defender. Tenemos una forma de jugar y no la vamos a cambiar. Respetamos mucho al Sevilla, pero vamos a competir y al final se verán los méritos de uno y otro equipo”.

“Nos podemos llevar un porrazo”
En los visitantes tampoco estará el portero habitual en Liga y UEFA. Andrés Palop dejará su lugar a David Cobeño, mientras que Antonio Puerta y Andreas Hinkel serán baja por lesión y sanción, respectivamente. Por decisión técnica no estarán Ernesto Chevantón, Renato, David Castedo y Fernando Sales, y al once regresan, respecto al último choque liguero, Frédéric Kanouté y Christian Poulsen. Juande Ramos mostró su preocupación ante un posible exceso de confianza de sus pupilos. “Ahora hay una cosa que me preocupa mucho. Sólo se habla de las finales de Copa y UEFA, parece que no vamos a jugar semifinales. Hay un desprecio hacia los equipos rivales peligrosísimo. Me gustaría equivocarme, pero nos podemos llevar un porrazo gordo si no los valoramos”, subrayó.