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1987: Heidi Støre

Durante dos décadas, Noruega ha sido reconocida como una de las principales potencias internacionales en el fútbol femenino, y Heidi Støre tiene mucho que ver en este aspecto.

Bettina Wiegmann (Alemania) y Heidi Støre (Noruega)
Bettina Wiegmann (Alemania) y Heidi Støre (Noruega) ©UEFA.com

Durante dos décadas Noruega ha sido reconocida como una de las principales potencias internacionales en el fútbol femenino, y Heidi Støre tiene mucho que ver en este aspecto.

La alta y ponderosa centrocampista hizo su debut internacional a la edad de 16 años en 1980 pero su gran salto lo dio siete años después, cuando Noruega se clasificó para la Segunda Competición de Fútbol Femenino. Aunque fue Trude Stendal la que conquistó el título para Noruega con dos goles en la gran final ante Suecia, la mayoría de los expertos reconocieron que Støre fue la jugadora clave para un equipo que lideró un grupo con Alemania, Dinamarca y Finlandia, y que derrotó a Italia en las semifinales.

"Recuerdo bien el torneo de 1987, sobre todo porque logramos vencer a muchos grandes equipos femeninos en nuestro camino hacia el título, tres de ellos por primera vez en la historia del fútbol femenino noruego. Para alcanzar la fase final tuvimos que eliminar a Dinamarca en Vejle y lo hicimos por un 5-2. Aquella fue nuestra primera victoria contra las danesas, y seguimos derrotando a Italia en la semifinal, también por primera vez. A pesar de que jugamos en casa, en Ullevaal, Suecia era la favorita en la final. Recuerdo que la final fue la primera vez que los medios de comunicación noruegos cubrieron con interés algo relacionado con el fútbol femenino, a lo que no estábamos acostumbradas. ¡Realmente disfrutamos! Nos habíamos enfrentado a Suecia muchas veces, pero era una especie de maldición para nosotras. Nunca las habíamos derrotado hasta aquel día en Ullevaal. La pequeña Trude Stendal marcó los dos goles. Habíamos tirado otra barrera", declaró Støre a uefa.com.

Støre cree que los entrenadores Erling Hokstad y Dag Vestlund jugaron un papel fundamental en el crecimiento del fútbol noruego. “Ellos instalaron una nueva y seria actitud hacia el deporte, con más horas de entrenamiento y más conciencia táctica”, comentó Støre, que levantó otra competición mundial no oficial al año siguiente y otra corona europea en 1993, además de su título favorito, la de la Copa Mundial Femenina de la FIFA de 1995. “En 1988 tuvimos la primera oportunidad de jugar con equipos de otros continentes y de ganar el torneo. Pero en mi carrera deportiva mi punto álgido tiene que ser el Mundial de Suecia de 1995. Aquel equipo noruego es el mejor en el que he jugado y creo que podría competir ante cualquier otra selección noruega desde entonces”.

Dos años después Støre sufrió un duro varapalo en el Campeonato de Europa Femenino de la UEFA, organizado en Noruega y Suecia. “El torneo de 1997 fue una gran decepción. Estuve horas en el gimnasio intentando volver de una lesión en el ligamento cruzado y lo hice justo a tiempo, pero no en mi mejor forma. Jugamos contra un inteligente equipo italiano en nuestro último partido de la fase de grupos, perdimos 2-0 y quedamos eliminadas del torneo. Abandoné el fútbol internacional allí y desde entonces me dediqué a jugar en el Nikko Securities en Japón”.

Después de jugar a nivel de clubes en el Råde, SK Sprint/Jeløy, Sweden's FC Trollhättan y Athene FK, Støre se tomó un descanso con el fútbol pero volvió con un trabajo en la Federación Noruega de Fútbol, desarrollando el fútbol femenino a nivel de clubes. Preguntada sobre sus posibles sucesoras en Finlandia comenta: “El fútbol europeo femenino es cada vez más difícil de pronosticar, ya que muchos equipos tienen más recursos. Noruega tiene que jugar al máximo cada partido para tener una oportunidad, pero la plantilla es una mezcla de juventud y veteranía que creo lo hará bien”.