Adiós al gran capitán
jueves, 15 de mayo de 2014
Resumen del artículo
Con la marcha de Puyol, se va el corazón y el alma del mejor Barça de la historia, un profesional ejemplar durante sus 15 temporadas en el primer equipo azulgrana.
Article top media content
Cuerpo del artículo
Después de 19 años en el club y 15 campañas en el primer equipo, Carles Puyol se despidió este jueves del FC Barcelona, el club en donde ha desarrollado toda su trayectoria deportiva. Capitán del equipo desde el curso 2004/05, Puyol ha encarnado mejor que nadie la figura del capitán como ejemplo de conducta y profesionalismo. Con él, se marcha el corazón y el alma del mejor Barcelona de la historia.
"Es un momento muy difícil para mí. Como os dije hace unos meses, los problemas en la rodilla no han desaparecido, así que mi etapa como jugador del Barcelona termina este 30 de junio. Hemos intentado buscar la solución y no la hemos encontrado, pero yo no me rindo. He vivido el sueño de millones de niños. He sido un privilegiado. Durante 19 años he hecho lo que más me gusta: levantarme y ponerme a entrenar y a jugar. He ganado muchos títulos, pero lo mejor que me llevo es la parte humana de este club", comentó un emocionado Puyol.
"Quiero dar las gracias a los presidentes, a los empleados, a los entrenador y a mis compañeros. He tenido la suerte de jugar con los mejores jugadores y también con las mejores personas. Gracias a todos. No me olvido de la afición por el apoyo que siempre me ha dado. Me siento muy afortunado. Por último quiero acordarme de personas que no están aquí: mi padre, Miki Roqué, Luis Aragonés y Tito Vilanova", concluyó el gran capitán del Barcelona.
La historia de Carles Puyol en el FC Barcelona arrancó en el curso 1995/96. Un aguerrido defensa de La Pobla de Segur llegó a la Ciudad Condal para integrarse en el filial azulgrana, donde poco a poco fue creciendo hasta convertirse en indiscutible y dar el salto al primer equipo de la mano de Louis van Gaal. El 2 de octubre de 1999 debutó en un partido de Liga ante el Real Valladolid CF y a partir de entonces trazó una línea directa a la cima del fútbol mundial. Desde aquel partido Puyol se convirtió en un habitual para Van Gaal, que confió desde el primer instante en la potencia y las dotes como marcador de aquel intenso lateral derecho.
No fueron años sencillos para el barcelonismo. Mientras el RC Deportivo La Coruña, el Valencia CF o el Real Madrid CF se llevaban la gloria, los títulos daban la espalda al conjunto azulgrana. La llegada de Frank Rijkaard, Ronaldinho, Deco, Samuel Eto’o y compañía devolvió la alegría al equipo, y en la campaña 2004/05 Puyol conquistó su primer título oficial con el Barcelona, seis años después de su llegada al primer equipo.
Un año después llegó el clímax: la soñada segunda Copa de Europa del Barcelona. 14 años después del primer entorchado en Wembley, el Barça se coronó en París tras una intensa final ante el Arsenal FC. Aquellos fueron años de esplendor para Puyol, convertido ya en uno de los mejores defensas centrales del mundo: todo concentración, perfecto al corte, poderoso juego aéreo. Una prolongación del entrenador en el campo. El jefe del equipo.
Parecía que el Barça había tocado techo, pero nada más lejos de la realidad. Se fue Rijkaard y llegó Pep Guardiola. Lo demás es historia del fútbol. En el curso 2008/09 Puyol se convirtió en el primer capitán del Barcelona capaz de levantar los seis títulos posibles al frente de equipo de leyenda. Los azulgranas no sólo fueron un rodillo, también se transformaron en un espejo en donde todo equipo debía mirarse: con jugadores procedentes de la cantera, el fútbol de toque como señal de identidad, el balón como principio y final de todo.
En 2011, y tras una nueva temporada de ensueño, el Barcelona conquistó su tercera Copa de Europa, otra vez en Wembley. Fue entonces cuando Puyol demostró su condición de perfecto capitán en un detalle para el recuerdo. A la hora de levantar la copa, en un momento que todo futbolista soñaría con protagonizar, cedió el brazalete a un Éric Abidal que había superado momentos muy complicados tras un tumor en el hígado.
Después de un par de temporadas marcadas por las lesiones en la rodilla, Puyol ha decidido este 15 de mayo de 2014 pone fin a su impecable trayectoria como jugador y capitán del equipo, convertido en un referente absoluto para todo el barcelonismo. Después de 593 partidos y 21 títulos, los aficionados echarán de menos su fortaleza, su garra y sus poderosos saltos. Para ellos siempre fue reconfortante saber que Puyol daría todo en defensa de su camiseta y su escudo. Para ellos Puyol siempre será el gran capitán.