Un último reconocimiento a Gerrard
domingo, 24 de mayo de 2015
Resumen del artículo
¿Puede alguien sustituir al mítico jugador del Liverpool? El inglés disputó su último partido con su club de toda la vida cuando se cumplen diez años desde la final de Estambul 2005.
Article top media content
Cuerpo del artículo
Después de la derrota del Liverpool FC por 1-3 ante el Crystal Palace FC en el último encuentro de liga en casa, la remodelación empezó en serio.
Las tareas de reconstrucción de Anfield terminarán en 2016 pero la remodelación de la plantilla tardará quizás algo más. El club ha tenido que remplazar a Xabi Alonso, Fernando Torres y Luis Suárez los últimos años pero parece que el hueco que dejará Steven Gerrard será difícil de llenar, un futbolista que ha jugado su último partido este domingo (derrota por 6-1, con gol incluido) antes de marcharse en verano a LA Galaxy.
La dura derrota en este último encuentro fue el punto y final a una temporada irregular, algo muy distinto a lo sucedido en la 2013/14, cuando el Liverpool terminó segundo en la Premier League. Esa gran actuación fue gracias, en gran parte, a un Gerrard rejuvenecido que lideró el centro del campo pero al final un revés ante el Chelsea FC evitó que el capitán y el club se quedaran sin el preciado título.
Nacido en Liverpool, Gerrard debutó con los reds en 1998 y podría decirse que se marcha del club como el mejor jugador del Liverpool después de 710 partidos y 186 goles, aunque sin el título de la Premier League en su palmarés. Kenny Dalglish, la única persona que podría luchar con él como el mejor jugador del club, apuntó en la página oficial de la entidad: "Lo más importante son los trofeos que has ganado. Eso te define, no los trofeos que no has podido ganar".
Y qué títulos: la UEFA Champions League, la Copa de la UEFA, dos FA Cups, tres Copas de la Liga y dos Supercopas de la UEFA. Pero además de por todos esos títulos, la carrera de Gerrard también se ha visto marcada por su larga duración y su lealtad al club. Zinedine Zidane dijo sobre él esta semana: "Siempre ha seguido siendo leal a su club, el Liverpool, el club de su corazón".
El estilo de Gerrard, una mezcla extraña entre el cómic Roy of the Rovers y el bailarín Rudolf Nureyev, ha sido imposible de igualar. El centrocampista ha sabido mezclar a la perfección una gran competitividad con una calidad sublime, y esa combinación ha dado muchos triunfos al Liverpool. Los aficionados europeos han sido muy afortunados, ya que el inglés ha reservado algunos de sus mejores momentos para las competiciones europeas: su impresionante gol en la final de la Copa de la UEFA de 2001; su tanto en el minuto 86 en la victoria por 3-1 en la UEFA Champions League sobre el Olympiacos FC en 2004; y, por supuesto, la histórica final de Estambul de la que el lunes se cumplen diez años.
La mayor remontada en una final de la UEFA Champions League en 2005 ha sido quizá el logro más importante en la carrera de Gerrard: nunca se rindió, marcó y creó un gran compromiso dentro de su equipo, y acabó el encuentro jugando como lateral derecho de emergencia.
Una década después el Liverpool se encuentra inmerso en una lucha por volver a su mejor nivel, pero ahora tendrá que intentarlo sin su mejor guerrero.