¿Cómo puso en el mapa Lucescu al Shakhtar?
lunes, 23 de mayo de 2016
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La salida del técnico de 70 años dejará un gran vacío en el banquillo del conjunto ucraniano. Igor Lynnik, de UEFA.com, explica cómo logró el rumano dar a conocer al club de Donetsk.
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Es difícil de creer, pero es cierto. Mircea Lucescu dice adiós al Shakhtar Donetsk, el club con el que levantó 22 títulos durante sus 12 años de estancia.
Tercer técnico extranjero en la historia del Shakhtar, tras Nevio Scala (que logró el primer título del club en 2002) y Bernd Schuster, Lucescu pudo haber sido el primero.
"El Shakhtar comenzó a seguirme cuando estaba en el Galatasaray y gané la Supercopa de la UEFA (en el 2000)", recordó el rumano. "En un momento, el presidente del Shakhtar Rinat Ahmetov envió un avión privado para que me buscase para hablar, pero fue en vano".
Lucescu ganó la liga de Turquía en el Galatasaray en 2002, y después se fue al Beşiktaş la siguiente temporada, donde añadió otro título y eliminó al Dínamo de Kiev de la Copa de la UEFA.
Ahmetov volvió a hacer un acercamiento para fichar a Lucescu, pero volvió a ser rechazado, lo que hizo que el presidente del Shakhtar fuese hasta Estambul para visitar al entrenador personalmente. "Ningún otro presidente haría eso", expresó Lucescu. "Me dijo: 'Has ganado dos ligas consecutivas, pero no ganarás una tercera'. Me hizo otra oferta y poco después me presentó como nuevo entrenador del Shakhtar".
Cuando el técnico llegó al equipo ucraniano, el club sólo contaba con un brasileño: Brandão. Un año después, habían llegado Matuzalém, Elano y Jádson. Se había establecido un patrón.
Lucescu se había enamorado del fútbol brasileño durante su etapa como jugador. Cambió camisetas con Pelé cuando jugó la fase final de la Copa Mundial de la FIFA 1974 con Rumanía en México. Su visión del Shakhtar era convertirlo en el primer puerto de llegada para los jugadores brasileños en Europa. En un comienzo no fue una medida muy popular, pero, con el club haciendo todo lo posible por recibir bien a los nuevos fichajes, pronto quedó demostrado que era un buen plan.
En términos de resultados, el Shakhtar alcanzó su cima de la era Lucescu en 2009 cuando ganó su primera competición europea y se llevó a Estambul la Copa de la UEFA. Sin embargo, la plantilla del otoño de 2012 pudo ser la mejor de todas tras superar la fase de grupos de la UEFA Champions League donde compartió grupo con clubes como el Chelsea y la Juventus, y llegar a la mitad de la temporada sin haber perdido ningún punto.
La gran habilidad de Lucescu fue su capacidad de regenerar equipos. En los últimos años se las ha ingeniado para encontrar reemplazo a jugadores de talla mundial como Fernandinho, Willian, Henrikh Mkhitaryan, Luiz Adriano y Douglas Costa, con la llegada de nuevos títulos y manteniendo la velocidad y la creatividad como la marca de sus equipos.
El próximo destino del técnico de 70 años es una gran incógnita, al igual que el futuro del Shakhtar sin él. ¿Seguirá llevando el talento brasileño allá donde vaya? ¿A dónde irá ahora el avión privado del presidente Akhmetov?