Impulso para el fútbol para ciegos

La UEFA ha establecido una asociación con un selecto grupo de organizaciones como parte de su proyecto Football for Abilities, que fomenta el uso del fútbol como herramienta para expandir la inclusión de jugadores con todo tipo de discapacidades, así como grupos marginados o excluidos.

El amplio programa ha dado a cada organización participante la oportunidad de desarrollar actividades a largo plazo y establecer ambiciosos objetivos, y las propias organizaciones han sido muy útiles para ayudar a la gente a cumplir sus sueños. La Federación Internacional de Deportes para Ciegos (International Blind Sports Federation - IBSA), que trabaja en nombre de los deportistas ciegos o parcialmente ciegos, es un ejemplo perfecto de los méritos de esta colaboración.

La IBSA ofrece un amplio rango de disciplinas deportivas para deportistas impedidos visuales. En el sector del fútbol, se incluyen dos tipos de fútbol sala, para jugadores totalmente ciegos (B1) y para deportistas parcialmente ciegos (B2/B3). Las reglas de Juego del Fútbol Sala han sido adaptadas para que los futbolistas ciegos o parcialmente ciegos tengan la oportunidad de disfrutar de la mejor manera posible de jugar y disfrutar de la diversión del fútbol. El balón B1 tiene un sistema especial de sonido dentro, y los equipos de cuatro jugadores tienen guían para darles consejos durante los partidos.

La UEFA y la IBSA comenzaron su asociación en 2006, cuando la última recibió un cheque benéfico de la UEFA por valor de 1 millón de francos suizos. Como consecuencia, el Proyecto de Desarrollo del Fútbol Sala en Europa de la IBSA celebró seminarios por todo el continente para educar a cientos de entrenadores y árbitros sobre el fútbol sala para ciegos. Ellos recibieron una formación básica de parte de acreditados entrenadores y árbitros de la IBSA que trabajan con jugadores ciegos las tácticas y las normas del juego.

"El apoyo de la UEFA nos ha abierto puertas. La UEFA es un nombre que se reconoce en todo el mundo, tiene una gran reputación y nos da credibilidad. El apoyo nos ha ayudado en muchas áreas, y estamos muy agradecidos por ello", dijo David Stirton, coordinador del proyecto europeo.

La IBSA promueve la amistad entre los deportistas ciegos, y motiva a la gente invidente a participar de forma regular en actividades deportivas; difunde ideas tanto sobre competiciones como sobre actividades deportivas de recreo para invidentes; y planifica, promueve y coordina actividades internacionales que estimulan el desarrollo de programas deportivos para ciegos en su países miembros. Su misión encaja perfectamente con los requisitos del proyecto de la UEFA, y en particular con la promoción de la inclusión social. "Puede haber falta de autoestima o de confianza entre la gente con discapacidades. El deporte les ayuda a superar eso. Hay una sensación de camaradería al formar parte de un equipo y tener la oportunidad de jugar junto a tus amigos", añadió Stirton.

El sentido de los logros deportivos y el orgullo de que un futbolista ciego o con deficiencia visual puede sentir que recibe la aprobación de Alexander Fangmann, capitán de la selección alemana y un participante entusiasta en el Campeonato del Mundo de Fútbol para Ciegos de la IBSA en Tokyo en 2013.

"Perdí la vista a los ocho años. Antes de eso jugué al fútbol como todos los niños. Después no perdí el entusiasmo por el fútbol y siempre me quedaba con el juego", asegura a sus 29 años. Fangmann está completando sus estudios en Tübingen, cerca de Stuttgart. "Hice el entrenamiento físico, pero no los deportes de equipo. Me enteré de la existencia del fútbol para ciegos por internet, fui a un seminario durante la Copa Mundial [de la FIFA] de 2006, y comenzó a partir de ahí. Yo no sabía qué esperar, si iba a jugar bien con otras personas ciegas, pero no hubo ningún problema".

Fangmann y sus compañeros que asistieron al seminario llegaron a casa con una gran cantidad de ideas, y el resultado ha sido un campeonato nacional alemán y una selección nacional lo suficientemente buena como para competir el título mundial. "Estamos naturalmente muy orgullosos, es un gran logro", reflexionó. Tras superar la pérdida de su visión para ofrjar una carrera en el fútbol, Fangmann no dudó en animar a todos los que quieran unirse al fútbol "sólo para probar". También hizo hincapié en la inclusión y el aspecto amistoso. "Hay una gran sensación cuando estás en un equipo y ganas".

"El respaldo que la IBSA recibe de la UEFA es, con mucho, el máximo nivel de apoyo para nosotros de una organización externa", explicó David Stirton, e hizo hincapié en que los proyectos iniciales se ejecutan con la UEFA y están dando grandes frutos. "Después de recibir el premio benéfico de la UEFA de la serie de seminarios que tuvieron mucho éxito en muchos países, con 438 participantes de 39 países diferentes.

"En muchos países donde tuvieron lugar los seminarios, los entrenadores y los árbitros se marcharon a sus casas y aplicaron lo aprendido en sus programas locales. Los países se están desarrollando hasta tal punto que ahora están listos para crear combinados nacionales y competir internacionalmente".

"La UEFA está muy interesada en que trabajemos desde la base, que tengamos en cuenta la importancia del fútbol base, así que ahora estamos viendo a los países europeos que están 'emergiendo' en este sector. Hemos organizado un torneo de desarrollo para ellos este verano y estamos intentando ayudarles a subir al siguiente nivel donde esperamos que puedan competir a nivel internacional en un par de años o menos".

"Los proyectos que estamos llevando con la UEFA pueden ser un ejemplo y un modelo a seguir para el desarrollo en otras partes del mundo. Nos gustaría tratar de replicar los proyectos en África, Sudamérica, Centroamérica y en algunas partes de Asia. Existe un gran potencial para el crecimiento y el desarrollo", concluyó Stirton.

El trabajo de la IBSA es ejemplar en complacer y lograr cosas para los deportistas. La UEFA está feliz porque su socio está haciendo un trabajo excepcional en un sector muy valioso de este deporte.