El árbitro de la final de la Europa League, István Kovács, listo para la acción

Mientras nos anticipamos a una brillante final de la UEFA Europa League entre la Atalanta y el Leverkusen, hay un hombre que estará más cerca de la acción que el resto de nosotros: el árbitro István Kovács.

La designación de Kovács llega al final de otra impresionante campaña para el colegiado rumano y representa la tercera temporada consecutiva en la que está de servicio en una final de clubes de una competición de la UEFA. Kovács dirigió la edición inaugural de la UEFA Europa Conference League en Tirana en 2022 y fue el cuarto árbitro en la final de la UEFA Champions League en Estambul el pasado mes de junio. Estas experiencias le sitúan en una buena posición para lo que le espera el miércoles por la noche en Dublín.

"Esta será mi segunda final de la UEFA como árbitro, y realmente es un sueño hecho realidad", afirma el colegiado de 39 años. "Haber arbitrado la final de la Europa Conference League en 2022 es, por supuesto, de gran ayuda para esta ocasión".

"Todavía recuerdo las sensaciones y la experiencia de aquella noche, pero aún tengo que trabajar y preparar bien el partido para que todo salga bien. Es una gran responsabilidad ser designado para este partido y quiero demostrar que estoy preparado para este reto".

Kovács dirigió la final de la Europa Conference League 2022UEFA via Getty Images

Kovács está acostumbrado a los grandes escenarios y también se prepara para arbitrar su segundo Campeonato de Europa de la UEFA este verano, pero sigue sintiendo orgullo al dirigir partidos de tan alto nivel.

"Me gusta la adrenalina cuando estoy en el campo; es una de las mejores cosas de ser árbitro", explica. "Si tomo buenas decisiones durante el partido, me demuestro a mí mismo que puedo dirigir estos grandes encuentros".

El partido del miércoles por la noche, ante 50.000 espectadores, no tendrá nada que ver con el primer encuentro que Kovács disputó como árbitro, cuando sólo tenía 14 años, y es el momento perfecto para reflexionar sobre sus 25 años en el cargo.

"Me encanta el fútbol. Para mí, ser árbitro es el trabajo más bonito del mundo, y recomiendo a los jóvenes que aprovechen esta oportunidad", afirma. "Durante mi carrera, he hecho muchos contactos, he entablado buenas relaciones con mis amigos y he disfrutado visitando muchos países diferentes gracias a mi trabajo".

Es un viaje, sin embargo, que Kovács reconoce que no podría haber hecho solo. "La final de la Europa League será un momento de orgullo para mí, pero también para el equipo que me acompaña y, en general, para el fútbol rumano", afirma. "Le debo a mucha gente en casa un gran 'gracias' por el éxito que he tenido en mi carrera".

"Mucha gente me ha ayudado con buenos consejos o apoyo cuando he tenido momentos difíciles. El Presidente de la Comisión de Árbitros de Rumanía, Kyros Vassaras, nos ha ayudado a mejorar muchas cosas en el fútbol nacional, y hay una persona que ha estado a mi lado desde que empecé, István Szilágyi, y le doy las gracias en particular porque siempre me ha apoyado".

Está claro que Kovacs tendrá muchos simpatizantes el miércoles por la noche, pero nada le distraerá hasta que el trabajo esté hecho.

"No cambio nada en mi forma de preparar los partidos", explica. "Hago lo mismo si se trata de una final europea o de un partido de la liga rumana, y eso me ayuda a estar totalmente concentrado. Una vez terminado el encuentro, podemos reflexionar y disfrutar de la ocasión".