La espectacular remontada del Werder Bremen

Ir con un 0-3 a las primeras de cambio no es la mejor forma de comenzar una participación en la fase de grupos de la UEFA Champions League, sobre todo cuando el premio a terminar entre los dos primeros es acceder a las semfinales.

Sin embargo, eso es exactamente lo que le ocurrió a Otto Rehhagel en su etapa en el SV Werder Bremen en las dos primeras jornadas. La diferencia entre la derrota por 3-2 ante el FC Porto en su primer choque y la visita del RSC Anderlecht fue que los campeones alemanes protagonizaron una de las mayores remontadas en la historia de la competición.

El campeón belga fue un rival de altura y su calidad pronto se hizo evidente cuando Philippe Albert batió a Oliver Reck a los 16 minutos de juego. Dos minutos después, Danny Boffin aprovechó un disparo de su compañero Filip Haegdoren para doblar la ventaja. Y el extremo de 18 años se abalanzó sobre el balón y anotó el 0-3 mientras los hinchas locales comenzaron a irse del campo con poco más de media hora disputada.

El Werder Bremen estaba dispuesto a levantarse y Wynton Rufer recortó distancias a los 66 minutos de juego, pero todo el mundo creía que era demasiado tarde. Sin embargo, una mala salida de Filip De Wilde permitió a Rune Bratseth cabecear y dar un rayo de esperanza. El empate llegó tras una jugada muy habilidosa de Rufer, que asistió a Bernd Hobsch para el 3-3.

El Bremen estuvo al borde del abismo, pero quedaban nueve minutos para encontrar un ganador. Únicamente pasaron dos minutos hasta que Marco Bode hizo el cuarto con un zurdazo y sembró el pánico en la zaga del Anderlecht.

El cuadro de Johan Boskamp estuvo a punto de conseguir la igualada a última hora cuando Luc Nilis mandó un balón al larguero, pero no tuvo su partido. La noche pertenecía al Bremen, y Rufer coronó su gran actuación con otro gol para completar lo que siempre será conocido como 'La Maravilla de Weser', en referencia al río que pasa alrededor de la ciudad de Bremen.