Di María hace soñar al Paris

Tres minutos y 49 segundos: eso fue todo lo que necesitó Ángel Di María para marcar el primer gol ante el Malmö y demostrar por qué el Paris Saint-Germain pujó tan fuerte por su fichaje este verano.

El Paris había movido ficha en 2014 para fichar al argentino, pero sólo el juego limpio financiero evitó el acuerdo. Sin embargo, el club galo finalmente se hizo con los servicios del jugador a cambio de 63 millones de euros el pasado agosto y el extremo causó una buena impresión en su debut en la UEFA Champions League con la elástica parisina.

El Mejor Jugador del Partido con el Real Madrid en la final de 2014, Ángel Di María regresaba a la competición tras un año de ausencia y lo hizo marcando el primer gol de la fase de grupos tras aprovechar un gran pase de Marco Verrati y enviar el balón al fondo de la red con su pierna izquierda.

Fue una definición que desbordó calidad, especialmente para un jugador que había hecho su debut con el PSG en el empate 2-2 del viernes ante el Burdeos. Estaba prevista que ésa fuese la noche de Zlatan Ibrahimović, con el delantero sueco mermado por un dolor abdominal para medirse a su exequipo, pero Di María acaparó todos los titulares con una actuación que promete mucho.

Y no fue que el argentino buscó compartir la gloria con Zlatan. Al contrario, Di María le puso dos balones perfectos su compañero en el frente de ataque en la primera parte. Desesperado por dejar su huella o aún con dolores en su costilla, Ibrahimović no estuvo del todo brillante para sacar ventaja en un partido que no salió como él esperaba.

"Di María hace que sucedan cosas. Puede correr con el balón en los pies y se siente muy cómo con él. Es explosivo y estamos encantados de tener a un jugador como él en nuestro equipo", afirmó Blaise Matuidi a UEFA.com tras la victoria por 2-0, redondeada por un cabezazo de Edinson Cavani.

Está claro que el Malmö no es un rival de peso en la UEFA Champions League y que el jugador de 27 años también comenzó en buena forma el año pasado con el Manchester United, pero Di María aportó una visión y una precisión en el juego colectivo del equipo que Ezequiel Lavezzi o Lucas solo habían aportado en algunos momentos.

Este fichaje también parece haber asentado al jugador, que ya afirmó a principios de semana que la vida se le había hecho complicada el año pasado en Manchester, donde ni él ni su familia pudieron establecerse, y las relaciones con Louis van Gaal se habían enrarecido.

Ahora disfrutando de una ciudad muy similar en su ambiente a Madrid o Lisboa, donde ya había brillado con el Benfica, Di María ha recibido la ayuda de su compatriota Lavezzi para aclimatarse a su nuevo entorno. Y quizás más importante, sus dos primeros partidos los ha disputado en la banda derecha, posición que le gusta y donde también jugó en el Real Madrid.

Tras haberle ubicado en su lugar preferido, Laurent Blanc ahora espera que los goles sigan llegando. "Es un futbolista que nos aporta mucha calidad con su pase, pero también creo que puede marcar muchos goles. Me ha dicho que no marca durante la temporada, pero es capaz de hacerlo", afirmó el entrenador del Paris.

Si Blanc está en lo cierto, el campeón francés puede estar preparado para afrontar su temporada más seria en la UEFA Champions League desde que regresó a la élite europea en el curso 2012/13.