En buenas manos: porteros campeones

Un campeón de la UEFA EURO en 1972 como Sepp Maier creía que el trabajo de un buen portero era muy simple: "Un portero debe dar una sensación de calma, y asegurarse de no quedarse dormido"

Ningún portero ha marcado en una final de la EURO, pero 14 sí han tenido un papel muy importante apoyando a su selección.

Porteros campeones 
2016 Rui Patrício (Portugal)
2012 Iker Casillas (España)
2008 Iker Casillas (España)
2004 Antonis Nikopolidis (Grecia)
2000 Fabien Barthez (Francia)
1996 Andreas Köpke (Alemania)
1992 Peter Schmeichel (Dinamarca)
1988 Hans van Breukelen (Holanda)
1984 Joël Bats (Francia)
1980 Harald Schumacher (República Federal de Alemania)
1976 Ivo Viktor (Checoslovaquia)
1972 Sepp Maier (República Federal de Alemania)
1968 Dino Zoff (Italia)
1964 José Ángel Iribar España
1960 Lev Yashin (Unión Soviética)

Peter Schmeichel hizo una gran demostración cuando Dinamarca se llevó el torneo en 1992. John Jensen y Kim Vilfort marcaron en la final por 2-0 ante Alemania, pero una parada tempranera de Schmeichel a Jürgen Klinsmann templó los ánimos teutones. "Si eso hubiera entrado creo que habríamos caído fácilmente. Cuando mis compañeros me vieron salvar el balón supieron que estaba en plena forma, y que iba a ayudar. Esa acción les dio poderes adicionales", afirmó Schmeichel.

La fase final de 1976, por su parte, es muy recordada por el asombroso penalti anotado por Antonín Panenka que batió a Sepp Maier para superar a la República Federal de Alemania, en una Checoslovaquia en la que el portero Ivo Viktor tuvo que desempeñar un papel inusual. "Fui yo el que hizo a Antonín Panenka eternamente famoso", explicó.

"Tuve un error terrible en el último minuto del tiempo regular. Fui a por un centro que estaba seguro que iba a atajar, pero Bernd Hölzenbein llegó primero y cabeceó sobre mí, por lo que llegamos a la prórroga. Panenka brilló en la tanda de penaltis con un disparo bombeado por el centro de la portería, pero a veces le recuerdo que si yo no hubiera cometido ese terrible error nadie habría oído hablar de él".

Iker Casillas paró sendos penaltis a Daniele De Rossi y Antonio Di Natale en la tanda de penaltis de cuartos de final contra Italia en 2008 para cambiar algo más que el curso del partido, el destino del fútbol español. "Fue el momento que toda España necesitaba para terminar nuestra racha sin ganar torneos y cambiar las cosas", afirmó el meta. De repente, en palabras de Casillas las "dudas internas" fueron desterradas. Dos títulos de la UEFA EURO y una Copa Mundial de la FIFA para que Casillas se convirtiese, en 2012, en el primer encargado de alzar en dos ocasiones el trofeo Henri Delaunay.

Durante su carrera Dino Zoff tuvo una influencia similar con Italia, especialmente en 1968 cuando ayudó a la Azurra a lograr un empate 1-1 ante Yugoslavia en la final de Roma antes de vencer en el partido de desempate por 2-0 en Nápoles. "No merecimos empatar el primer partido. Dos días después, sin embargo, nos merecimos ganar. Encajé un gol en cuatro partidos de las fases finales, pero lo importante no era Zoff, sino la victoria del equipo", señaló el mítico meta.

Los porteros ganadores de la EURO son una mezcla de sólidos metas como Zoff o el griego Antonis Nikopolidis (que mantuvo su puerta a cero en la EURO 2004), y genios como el héroe de la URSS en 1960, Lev Yashin. Los dos metas franceses que han salido campeones han sido muy carismáticos: el vencedor en 1984 Joël Bats era un artista en el fondo, y más tarde escribió poesía y una canción infantil que fue un éxito, L’Escargot (el caracol), mientras que el ritual de Laurent Blanc de besar la cabeza de Fabien Barthez antes de cada partido les dio suerte en la UEFA EURO 2000.