El Sevilla pasa con solvencia

Por Antonio Barragán

El Sevilla FC sigue con su sueño europeo tras vencer 0-1 al CD Nacional y lograr así clasificarse para la fase de grupos de la Copa de la UEFA 2004/2005. En un partido anodino, los nervionenses supieron imponer su mayor calidad en los metros finales.

Tranquilidad en el frente
Los momentos iniciales en Os Barreiros fueron de tanteo por ambas escuadras. Mediocampismo y bostezos que por lógica, beneficiaban más al Sevilla. Los obreros de la línea de medios sevillista presionaban muy arriba. Así conseguían que el juego tuviese un color grisáceo de ése que hace las delicias del técnico Joaquín Caparrós sobre todo cuando su equipo juega como visitante. Tan sólo algunos detalles de Jesuli y Daniel Alves (toque de espuela incluido) ponían algo de frescura al juego por parte sevillista, y Cleomir Santos por lado del Nacional.

Darío tiene la primera 
De esta manera se llegó al minuto 16 de juego. Un saque de banda cercano al área portuguesa desde el flanco izquierdo del Sevilla, y tras un rechace, provocó que Darío Silva se quedase sólo frente al portero. El charrúa lanzó el balón por encima de la puerta portuguesa cuando los 800 aficionados sevillistas desplazados a Madeira cantaron el posible gol.

Jesuli sentencia 
A partir de ahí el Nacional tomó algo más la posesión del esférico pero sin mordiente. El cloroformo que el Sevilla aplicaba al partido parecía no acabarse y  los andaluces sabían que en una de las pocas estiradas que realizaban hacia la meta de Hilário tendría que acabar dando la puntilla a la eliminatoria. En efecto. En el minuto 35, Darío, un felino en eso del juego vertical, en jugada personal por el centro del terreno de juego, habilitó a Jesuli que de fuerte ‘chut’ lograba el 0-1. El canterano apareció solo por la izquierda y sin oposición fusiló a Hilário. Y después más de lo mismo: lento transcurrir de los minutos, algo de impotencia local y aburrimiento, mucho aburrimiento.

Sin cambios en el guión
Llegó el descanso y la reanudación trajo más de lo mismo. Los portugueses tenían más el balón pero a ritmo diesel y sin apenas amagos de ataques. Caparrós también siguió a lo suyo e introdujo a los mediocampistas Renato y Jordi López para terminar de dormir el partido. Más gladiadores tácticos frente a un centro del campo del Nacional con ciertos tintes anarquistas.

Final con goles
Con un Sevilla ya confiado de su pase, el Nacional consiguió colgar un par de balones en el área sevillista. En una de éstas, con un libre indirecto desde la derecha, apareció la cabeza del goleador local Adriano que lograba en el minuto 75 el 1-1. Pero fue un espejismo, el Sevilla quería pasar a lo grande, y tras jugada por la derecha de Antoñito y pase de la muerte, Renato lograba el definitivo 1-2.