Van Aerle revive la noche de gloria del PSV

El ex defensor de Holanda Berry van Aerle trabajó brevemente como cartero después de retirarse del fútbol, pero, de vuelta en el PSV Eindhoven como ojeador, está luchando por contener su emoción antes de la eliminatoria de la UEFA Europa League del jueves con el SL Benfica que le recuerda los días felices de la campaña 1987/88.

La falta de pelo en la cabeza y en el bigote significa que Van Aerle, de 48 años, no es inmediatamente reconocible como el hombre que ganó todo lo posible a nivel de clubes y selecciones durante aquel verano. Sin embargo, menciona aquella temporada y los años posteriores mientras recuerda cómo, bajo el mando de Guus Hiddink, el PSV arrasó en el país y en Europa antes de que cinco jugadores de la plantilla constituyeran la columna vertebral de Holanda en su triunfo en el Campeonato de Europa de la UEFA.

"Fue una experiencia hermosa, única, y 1988 es un año que nunca olvidaremos. El Campeonato de Europa coronó una temporada excepcional a nivel de clubes. Fuimos campeones de liga y de la Copa de Holanda, así que cuando a continuación también ganamos la Copa de Europa y, algunos de nosotros, la EURO '88, bueno, ¿quién habría esperado eso?", afirmó.

Aunque la mayor sorpresa fue sin duda la primera conquista del PSV en la Copa de Europa, después de que una victoria en semifinales sobre el Real Madrid CF permitiera ver una final contra el Benfica. Aquí, el PSV debió recurrir a los penaltis tras un empate 0-0 en los 120 minutos disputados en Stuttgart. "No fue un partido especialmente bueno, con ambos equipos muy cautelosos, pero fue emocionante hasta el final y se vivió una tensa tanda de penaltis. No importa cómo lo ganas, siempre que lo hagas. Ahora estamos en los libros de historia para siempre, ya que levantamos este trofeo ", dijo Van Aerle a UEFA.com.

La cosecha actual del club de la Eredivisie se encuentra a cuatro partidos de su propia dosis de gloria europea, empezando con un viaje a Lisboa para el partido de ida de los cuartos de final de la UEFA Europa League ante el Benfica. "Es difícil comparar al PSV de entonces con el equipo actual pero, situado en la parte alta de la Eredivisie, también tiene calidad. Si consigue la clasificación su confianza crecerá y el PSV podrá aspirar a cotas mayores. Eso es lo que nos pasó en 1988".

"Teníamos un equipo fantástico. Nuestra unidad era única. Guus Hiddink dio a todo el equipo, desde el número 1 al 20, la sensación de formar parte del equipo, manteniendo satisfechos a todos. Es un maestro a la hora de la creación de un grupo muy unido, por lo que todos los jugadores se sienten valorados. También contamos con una mezcla perfecta de jugadores que trabajan duro y otros de mayor calidad, de la talla de Ronald Koeman, Erik Gerets, Soren Lerby, Wim Kieft y Gerald Vanenburg rodeados por Jan Heintze, Willy van de Kerkhof y Gillhaus Juan", continuó Van Aerle.

Aún está por verse si el equipo de Fred Rutten, golpeado después de la derrota por 2-0 del sábado ante el FC Twente, comparte estas características. En cualquier caso, cuando comience la eliminatoria contra el Benfica en esta semana, Van Aerle, de vuelta en el PSV como coordinador de aficionados y ojeador, luchará por reprimir una sonrisa.