El Rubin, cauteloso ante Olympiacos

Decir que el FC Rubin Kazan disfrutará de la ventaja de jugar en casa en el partido de ida de los dieciseisavos de final de la UEFA Europa League ante el Olympiacos FC es algo discutible.

Es cierto que los jugadores del Rubin estarán más preparados que los visitantes griegos para combatir las bajas temperaturas, las previsión para el martes es de -15ºC, pero jugarán en un campo situado a 800 kilómetros de su estadio en Kazán ya que el partido se disputará en el Luzhniki Stadium de Moscú.

Se trata de un viaje de más de diez horas para los aficionados que decidan apoyar a los suyos aunque según el capitán, Roman Sharonov, es mejor opción que jugar en un campo cubierto de hielo: "Evidentemente no es la mejor solución para nuestros seguidores pero sería muy complicado jugar en nuestro estadio en estas condiciones. Incluso el Lokomotiv ha tenido que trasladar su partido de la UEFA Europa League ante el Athletic Club al Luzhniki".

"Para los aficionados ver partidos de fútbol con este tiempo es como ver bandy", apuntaba Sharanov en referencia a un popular deporte en Rusia y en los países escandinavos que tiene cierta similitud al hockey hielo. "La diferencia es que con el bandy acostumbras a tomar bebidas calientes y a llevar prendas y calzado de abrigo", añadió el capitán del Rubin.

Independientemente del calor o del frío que pasen los espectadores, el miedo del Rubin es quedarse helado ante el Olympiacos tal y como sucedió ante el FC Twente en el Luzhniki la pasada temporada a estas alturas de la competición. Mientras que el líder de la liga rusa sigue en el parón invernal, el conjunto griego viaja a Moscú tras ganar cuatro partidos de forma consecutiva en el campeonato doméstico, entre ellos el triunfo por 2-0 en el derbi ante el AEK Athens el pasado fin de semana o el logrado por el mismo resultado ante un PAOK FC que se midió al Rubin en la fase de grupos.

Por el contrario, el Rubin ha preparado el partido en dos concentraciones llevadas a cabo en Europa meridional. La primera fue en Turquía y la segunda en España, donde los hombres de Kurban Berdyev participaron y ganaron la Copa de Marbella. En este torneo ganó tres partidos, incluyendo la final donde derrotaron por 2-1 al FC Dynamo Kyiv. "Hubiera sido mejor jugar más partidos. Es difícil evaluar nuestro nivel y está claro que no estamos al cien por cien. En España nosotros hemos jugado un partido completo, ya que antes jugábamos entre 30 y 60 minutos por juego", dijo el veterano defensa central Sharonov.

Después de que la concentración en España finalizara el domingo, el Rubin tomó un vuelo chárter a Moscú, donde ha pasado 48 horas para adaptarse al intenso frío. "Es estresante pasar de un tiempo llevable a uno tan fuerte además de los cambios horarios", admitió Sharonov, que espera que su equipo pueda lograr un buen resultado ante el Olympiacos.