Dzsudzsák regresa a su casa con el PSV
miércoles, 20 de octubre de 2010
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El extremo húngaro se enfrenta a una prueba de profesionalismo en el choque entre el Debrecen y el conjunto holandés, que buscará dar un nuevo golpe para llegar a los dieciseisavos de final.
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Las derrotas en sus dos primeros partidos han dejado al Debrecen como colista del Grupo I, y el conjunto húngaro sabe que le espera otra difícil oposición con la visita del PSV y de su extremo zurdo Dzsudzsak. El internacional húngaro de 23 años floreció en las filas del Debrecen, ayudando al club a ganar tres títulos consecutivos entre 2005 y 2007 antes de trasladarse a Holanda en enero de 2008.
El regreso a casa en tales circunstancias será difícil para Dzsudzsak, aunque el jugador dijo a UEFA.com que conoce sus responsabilidades. "Todavía hay muchos vínculos emocionales entre el DVSC y yo, y esta afinidad continuará después del partido, pero durante el encuentro que nadie en Debrecen espere otra cosa que mi mejor esfuerzo. Soy jugador del PSV y mi trabajo es dar lo mejor de mí cuando juego", aseguró.
El PSV ya ha adoptado a Dzsudzsak, con su habilidad para superar al último defensor y enviar excelentes centros con los dos pies recibiendo muchas alabanzas en Holanda. Su récord de 30 goles en 90 partidos de la Eredivisie tampoco es para despreciar, pero sus amigos en Debrecen siempre supieron que el muchacho era un poco especial.
El que una vez fuera su capitán, Zsolt Vadicska, recordó: "Es un jugador talentoso, pero también tuvo una especial dedicación al juego. Incluso cuando era un niño, tomó clases adicionales para mejorar y pasó todo su tiempo libre practicando tiros y técnicas diferentes. Eso es lo que hace que un jugador con talento sea realmente grande".
El director general del club, Sándor Szilágyi, agregó: "Siempre respetó a los jugadores más experimentados y era muy humilde. Podía pedir a los porteros que se quedaran con él después del entrenamiento para practicar lanzamientos de falta desde izquierda y derecha, de cerca y de lejos. Aunque se marchó al extranjero y se convirtió en una estrella, aún nos llama con frecuencia y sigue siendo el mismo chico que era".
Dzsudzsak sigue atento a su antiguo equipo, y es consciente de que, sin importar lo que sugieran los resultados anteriores, no será una presa fácil en su propio terreno. "El Debrecen sigue siendo un equipo fuerte. Puedes ver su mayor fortaleza cuando juegan al contraataque. Son inteligentes y rápidos y tienen algunos jugadores creativos, por lo que no es un rival fácil", afirmó.
El delantero prometió no "correr alrededor del estadio sin su camiseta" en el caso de que consiga anotar un gol contra su ex club, deseoso de mantener buenas relaciones con los aficionados locales. Sin embargo, en Debrecen se le insta a buscar objetivos aún más grande todavía. El centrocampista Zoltán Kiss explicó: "Es un buen tipo y un buen jugador. Estoy seguro de que el PSV no será su último club, y que algún día jugará en un equipo más fuerte".