Otro título para el Milan

El Milan se ha hecho con la Supercopa de Europa de la UEFA tras derrotar al Sevilla FC por 2-1 en el partido disputado en el Stade Louis II. El encuentro, que fue un continuo homenaje a Antonio Puerta, fue bastante disputado, sobre todo en su primera mitad, donde los dos equipos buscaron con ahínco la portería contraria. En el segundo periodo el Milan se aprovechó del bajón sevillista para llevarse el partido gracias a los tantos de Filippo Inzaghi, Marek Jankulovski y Kaká que remontaron el gol de Renato en los primeros minutos.

Ocasiones
Quizá motivados por un espectacular minuto de silencio en homenaje a Antonio Puerta, ambos equipos hicieron un guiño al fútbol y salieron en busca de la portería contraria. Los primeros compases de la contienda fueron eléctricos con dos acciones que pudieron cambiar el signo del encuentro. Renato mandó fuera por poco un lanzamiento desde fuera del área en el 2’ y Kaká disparaba al palo, tras dar en Daniel Alves, en el 4’ aprovechándose de una indecisión de Christian Poulsen, gran sorpresa en la alineación al colocarle Juande Ramos en el centro de la zaga.

Gol para Puerta
Ambos equipos bajaron el nivel conscientes de la altura de temporada en la que se encuentran. El encuentro discurría con normalidad hasta que el Sevilla demostró porque es especial. Córner botado por Duda que remata Renato entrando el balón a la red tras golpear en un defensa italiano. Sorprendente gol y espectacular celebración de todos los jugadores del conjunto hispalense brazo en alto señalando al cielo en homenaje al malogrado Antonio Puerta.

A punto de sentenciar
El Sevilla seguía mostrando el nivel que todos conocíamos y gozó de dos buenas ocasiones en los pies de Frédéric Kanouté. En el 24’ estuvo a punto de llegar la sentencia. Un balón desde la banda de Alves quedó en los pies de del delantero africano tras un la despeje de Gennaro Gattuso. El de malí se la dejó a Renato que solo ante la portería veía como su disparo lo sacaba bajo palos Alessandro Nesta. La maquinaria sevillista empezaba a funcionar a pesar de que en el 30’ Clarence Seedorf mandaba fuera un claro remate de cabeza tras un córner botado por Andrea Pirlo y peinado por Nesta.

Peligroso
Los siguientes minutos del encuentro seguía con un ritmo frenético, con ambos equipos acercándose con peligro a la portería contraria. Kanouté la tuvo, al igual que Máximo Ambrosini, pero el partido llegó al descanso tras un tanto anulado a Inzaghi por fuera del juego. Una primera parte que hacía un guiño al fútbol tras una semana tan dura. El actual Supercampeón de Europa se marchaba por delante en el marcador.

Empata el Milán
El segundo periodo comenzó con un juego mucho más tranquilo que en la primera mitad. El Milan asumía el tempo del encuentro necesitado de un tanto mientras que los andaluces se replegaban un poco buscando salir con velocidad en los contraataques. En el 55’ llegó el empate italiano. Una buena jugada por banda de Gattuso la culminó el internacional con un grsn centro que cabeceó a la red Inzaghi.

El segundo rossonero
Cuando los dos equipos aun procesaban el tanto del empate llegó el segundo del Milán. Un espectacular pase de Pirlo desde el centro del campo lo empalaba Jankulovski a la red. Juande Ramos no tardaba mucho en reaccionar y sacaba a Aleksandr Kerzhakov en lugar de José Luis Martí, claro cambio ofensivo. Los minutos pasaban y apenas se creaban ocasiones de gol. El cansancio sevillista unido al control del partido por parte de los italianos, jugando a placer con la ventaja en el marcador, hizo que las oportunidades brillaran por su ausencia.

Últimos intentos
El Sevilla lo intentó en los últimos minutos y tuvo dos claras ocasiones en la cabeza de Kader Keita y en un balón al que no llegó Luis Fabiano por milímetros. Aun así, la puntilla llegó en el minuto 86 cuando Kaká marcó el tercero del Milán. El astro brasileño fue derribado dentro del área por Ivica Dragutinović. En la posterior pena máxima, el balón era detenido por Andrés Palop pero Kaká aprovechaba el rechace para marcar. En el tiempo añadido los andaluces tuvieron ocasión de reducir distancias, pero nada cambió y así se llegaba al final de un encuentro en el que el Sevilla no pudo homenajear a Puerta con una victoria, pero si lo hizo dando la cara como el gran equipo que es.