A repetir lo de Eindhoven
viernes, 25 de agosto de 2006
Resumen del artículo
El Sevilla espera repetir su actuación en la final de la Copa de la UEFA en la Supercopa ante el Barça.
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Los aficionados del Middlesbrough FC recordarán como un día en el que pudo llover y en el que al final brilló el sol el pasado 10 de mayo, el día en el que el Sevilla ganó la Copa de la UEFA. El verano llegó pronto a Eindhoven. Sorprendentemente las temperaturas eran bastante altas, el cielo estaba despejado, los seguidores del Sevilla habían traído el sol de Andalucía a la final y el estadio se convirtió en una olla a presión.
Fiesta
La victoria del Sevilla contra el FC Schalke en la semifinal coincidió con la Feria de abril en la ciudad hispalense y la fiesta continuó en el estadio del PSV cuando los de Juande Ramos ofrecieron una auténtica exhibición. La victoria por 4-0 sobre el Middlesbrough fue incontestable. El veterano capitán sevillista Javi Navarro levantaba así la Copa de la UEFA, el trofeo que inauguraba el palmarés europeo de los sevillanos.
Vuelta de honor
Éste era el primer título para el Sevilla desde que ganó la Copa de España en 1948. El Middlesbrough vio como sus aficionados, acostumbrados durante la temporada a momentos increíbles, aplaudían al Sevilla en su vuelta de honor. El equipo inglés tuvo una participación memorable en la Copa de la UEFA de la temporada 2005/06. Así lo cuenta su capitán Gareth Southgate, que destaca las remontadas ante FC Basel 1893 y FC Steaua Bucuresti como “noches que nunca olvidaremos”. Pero en su último partido, antes de marcharse a dirigir a la selección inglesa, Steve McClaren no pudo llevar a cabo una de las citadas remontadas en la final.
Apuesta
Con 20 minutos por jugarse, y tras el perfecto cabezazo de Luis Fabiano en el minuto 27 que ponía al Sevilla por delante, McClaren se lo jugó todo. Metió en el campo a Yakubu Ayegbeni como cuarto delantero, pero nada cambió. El Sevilla aprovechó los espacios que los ingleses les habían dejado y los dos goles de Enzo Maresca, jugador del partido, y de Frédérick Kanouté aseguraron la victoria. Fue un resultado increíble e incluso una persona seria como Juande Ramos, esbozó una pequeña sonrisa en la rueda de prensa posterior al partido con una medalla colgada de su cuello.
Orgulloso
Si antes de que diera comienzo el partido las cámaras habían seguido a McClaren, ahora las cámaras seguían a Juande Ramos. Después de una carrera en equipos españoles de nivel medio, estaba en lo más alto por primera vez. “Estamos orgullosos de decir que ahora Sevilla es la capital del fútbol europeo, por lo menos una semana, hasta que se dispute la final de la UEFA Champions League. La gente ha esperado mucho para conseguir esta victoria, estamos muy contentos”, comentaba Juande.
Alegría
Fue un logro notable. El entrenador, formado en el club rival de la ciudad hispalense, el Real Betis Balompié, se encontró a principio de temporada con mucha oposición precísamente por este hecho. En unos meses todo cambió y esos detractores se han alegrado con la renovación del contrato de Juande Ramos llevada a cabo este verano. La temporada del Sevilla no acabó todo lo bien que esperaban, ya que se quedaron fuera de la UEFA Champions League en la última jornada. Sin embargo, para Juande fue un buen resultado teniendo en cuenta las posibilidades del club. Este verano han abierto la caja y se han gastado dinero en traer a buenos jugadores como Christian Poulsen, Ernesto Chevantón y Andreas Hinkel. Juande comentó en Eindhoven que “esto es como una explosión de alegría que no se puede describir”. Ahora se las verá con el FC Barcelona con la Supercopa de la UEFA en juego y con la esperanza de volver a sentir lo mismo que el pasado 10 de mayo.