Nadie detiene a Portugal

Algo que se repitió durante los primeros campeonatos sub-16 fue que el finalista de un torneo, el año siguiente se proclamaba campeón. Y Portugal se convirtió en la tercera selección en seis temporadas en hacer precisamente eso en 1989 en Dinamarca, donde ganó con un gran estilo.

Portugal, adelante
De las habituales participantes, sólo la semifinalista de 1988 Alemania Federal no se clasificó, tras perder por un marcador global de 3-0 su eliminatoria ante la ex campeona Unión Soviética. Portugal, que había perdido la final de 1988 en los penaltis, quedó en la primera plaza del Grupo A, tras vencer a Suiza por 2-0, a Noruega por 3-0 y a Rumanía por 4-0 en su camino a las semifinales. La anfitriona Dinamarca comenzó con una victoria por 9-3 sobre Austria, la mayor goleada hasta la fecha en una fase final del europeo sub-16, y un récord global que sólo sería superado cuando el evento se convirtió en sub-17 en 2001. Sin embargo, fueron Francia y Yugoslavia, que empataron 0-0, las que dominaron el Grupo B. En la segunda jornada, Dinamarca venció por 2-0 a Yugoslavia, y Francia derrotó a Austria por 3-2. Yugoslavia después derrotó a Austria por 2-0, pero quedó fuera por la diferencia de goles, ya que Francia superó a la selección anfitriona por 4-0.

España sobrevive
La campeona España estuvo en el Grupo C, y derrotó a Holanda por 2-0 en su primer partido. Un empate 2-2 con Bulgaria dejó el grupo igualad a falta de la última jornada, pero en ella, España se impuso a Grecia por 1-0 superando a los holandeses, que derrotaron a Bulgaria por el mismo marcador. La República Democrática Alemana, tercera en 1988, comenzó el Grupo D con una victoria por 1-0 ante Italia, mientras que la Unión Soviética derrotó por 2-1 a Escocia. El resto de resultados del grupo fueron empates, 2-2 entre la República Democrática Alemana y Escocia, y el resto 1-1. Eso incluyó el decisivo encuentro entre alemanes y soviéticos, por lo que la República Democrática Alemana, al igual que había hecho el año anterior ante Suecia, avanzó tras su victoria por 5-4 en la decisiva tanda de penaltis.

Triunfo de Figo y compañía
En las semifinales, Portugal se vengó de la final de 1988 derrotando a España por 2-1, mientras que la República Democrática Alemana se impuso a Francia por 3-0. Los franceses terminaron terceros tras vencer a España por 3-2, pero el título se fue a la península ibérica, ya que Portugal ganó por 4-1 a Alemania. Nelson Lemos abrió el marcador en Vejle en el minuto 16, y aunque Lars Kampf empató justo después del descanso, Luís Figo, Nelson Gomes y Miguel Simão decidieron el encuentro.

Sin triunfo escocés
En la posterior Copa Mundial Sub-16 de la FIFA en Escocia, la República Democrática Alemana cayó en los cuartos de final ante la anfitriona, que después derrotó a Portugal por 1-0 en las semifinales antes de caer en los penaltis de la final ante Arabia Saudí.