Makarov, el héroe de Rusia

Después de llevar a su selección a lograr el Campeonato de Europa Sub-17 de la UEFA, Dmitri Khomukha dijo que ahora el objeivo de su equipo es la Copa Mundial Sub-17 de la FIFA, y elogió el trabajo de sus jugadores y el cuerpo técnico.

El defensa Sergei Makarov fue el hombre encargado de un paso adelante para ejecutar el penalti ganador, y reveló los consejos que recibió de sus compañeros de equipo. "Me dijeron 'creemos en ti'", destacó, todavía en el estado de shock que le suponía tener la medalla de ganador en su cuello.

Dmitri Khomukha, seleccionador de Rusia
La primera y la segunda mitades han sido diferentes, pero es bastante comprensible. Había un montón de cansancio, no sólo físico, sino mental. Fue muy duro para mis chicos, así que no hay nada extraño. Nuestro equipo técnico logró elegir los muchachos que eran capaces de soportar la presión en este tipo de situaciones estresantes y mostrar sus puntos fuertes. Por eso confiamos en esos tipos.

Esta es una experiencia muy valiosa, y no puede ser cambiada por nada. Los chicos entiendan qué tipo de oposición espera en el futuro si juegan en clubes profesionales. El cuerpo técnico ha aprendido mucho también. Estamos muy contentos de haber participado en este torneo y como nos las arreglamos para llegar a ser campeones de Europa. Ahora vamos a tratar de ganar la Copa del Mundo.

Dzhamaldin Khodzhaniyazov, defensa de Rusia
No tengo palabras. Ni siquiera soñaba que íbamos a ser campeones de Europa, y el señor Michel Platini nos daría las medallas de oro. Por supuesto, todos estamos encantados. El entrenador no nos dijo nada especial en el primer tiempo. Sólo nos animó un poco, y nos pidió que no tuviéramos miedo de jugar al fútbol. Vamos a tratar de hacerlo lo mejor posible en la Copa Mundial y ver cuál será el resultado final.

Sergei Makarov, defensa de Rusia
No puedo describir lo que siento en este momento. Todavía no puedo creer que hayamos ganado el Campeonato de Europa. Tal vez necesito un poco de tiempo, y me daré cuenta de esto en dos o tres horas. Mis compañeros me dijeron: "Sólo tienes que ir, creemos en ti. No te pongas nervioso. Si marcas, bien hecho, si no, es algo que le puede pasar a cualquiera ". Todos estábamos muy nervioso ya que era una final donde no hay lugar para los errores. Empezamos a jugar con la cabeza fría en el segundo tiempo y ganamos en confianza, y nuestro rival no sabían qué hacer.

Perdimos 3-0 ante la República Checa [en el primer partido en la fase preliminar], pero después de esto nos dijimos que todavía podíamos ir a la ronda élite y luchar allí. Y ahora se puede ver lo que hemos logrado.