España disfruta de su quinto título
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Ganador del Campeonato de Europa Sub-19 de la UEFA en cuatro de las seis primeras ediciones, pero sin un triunfo desde 2007, volvió a vencer en Rumanía tras un choque dramático.
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La décima edición del Campeonato de Europa Sub-19 de la UEFA disputado en Rumanía terminó de forma familiar y con España alzando el trofeo.
Campeón en 2002, 2004, 2006 y 2007, consiguiósu quinto título, el cuarto para su entrenador Ginés Meléndez, tras una final dramática.
Con Francia, Italia, Portugal, Holanda, Inglaterra y Alemania eliminados en la Ronda Élite, la República de Irlanda y Bélgica se clasificaron tras una ausencia que duraba desde 2002 y 2006 respectivamente. Rumanía fue la anfitriona, debutó en una fase final y descubrió la dureza del torneo.
El técnico local Lucian Burchel tomó la ventaja en la primera parte de su debut en el Grupo A ante la República Checa en Chiajna, pero finalmente sucumbieron por 1-3, mientras que dos goles de Anthony O'Connor dieron el triunfo de Irlanda sobre Grecia.
Los irlandeses también anotaron primero frente a los checos en la segunda jornada, pero dos goles en tres minutos en la segunda mitad dieron la vuelta al electrónico, mientras que Grecia derrotó a los anfitriones por 0-1. La República Checa se aseguró disputar las semifinales con el 1-0 sobre Grecia, un resultado que le sirvió a Irlanda quedar segundo con su 0-0 frente a Rumanía.
España y Serbia tomaron el control del Grupo B en el choque inicial, aunque el primero tuvo que esperar para consumar su victoria sobre Bélgica en un partido que se suspendió por las condiciones climáticas a los 15 minutos y tuvo que repetirse. Al día siguiente venció 4-1, y también logró una victoria por 0-4 ante Serbia, que había vencido 2-0 a Turquía en la primera jornada. La selección de Ginés Meléndez se aseguró el pase a semifinales.
Serbia tuvo que esperar a la tercera jornada siendo segundo de grupo con su empate frente a Bélgica, mientras que Turquía aprovechó la relajación española y venció 3-0, pero se quedó fuera tras un gol belga en los minutos finales de su partido.
La República Checa se enfrentó a Serbia en la primera semifinal en Mogosoaia y en el minuto 20 ya vencían por 3-0 gracias a los goles de Tomáš Přikryl, Tomáš Kalas y Tomáš Jeleček, el tercero de penalti. El doblete de Djordje Despotović devolvió la emoción al encuentro en el minuto 28, pero Jiří Skalák sentenció en el descuento.
Finalista en 2010, España se clasificó para su sexta final sub-19 en una demostración de ataque frente a Irlanda en Chiajna, con Gerard Deulofeu y Pablo Sarabia anotando grandes goles en la primera parte. Juanmi añadió el tercero al inicio de la segunda parte y después apareció el máximo goleador del torneo, Álvaro Morata, para hacer dos más en una cuenta particular que se alzó hasta seis, en parte gracias a sus tres dianas en la segunda jornada frente a Serbia.
El cuadro de Meléndez se vio por detrás en el marcador en la final tras un fuerte disparo raso de Ladislav Krejčí a los 52 minutos, pero el espíritu de España tuvo su recompensa en el minuto 85 con el empate de Jon Aurtenetxe. El suplente Patrik Lácha devolvió la ventaja a los checos en el 97, ya en la prórroga, pero no hubo tregua y Paco Alcácer respondió a los once minutos y finalmente decidió con otra diana en el 115 para provocar la alegría española.