Griezmann, un secreto a voces
jueves, 22 de julio de 2010
Resumen del artículo
En San Sebastián todo el mundo lo conoce y le pide fotos y autógrafos, pero el hábil extremo está empezando a ser reconocido por sus compatriotas en este Europeo sub-19.
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Tras un inspirado partido ante Holanda, Antoine Griezmann acaparó todas las portadas con sus dos goles y una asistencia en el segundo partido del Campeonato de Europa Sub-19 de la UEFA.
Griezmann dejó su Francia natal a la edad de 13 años, cuando se marchó al País Vasco para fichar por las categorías inferiores de la Real Sociedad. El año pasado deslumbró en la segunda categoría del fútbol español, jugando 39 partidos y marcando seis goles. "Es un poco raro que nadie me conozca aquí, porque en España siempre que voy a la ciudad la gente me pide una foto o un autógrafo. Pero está bien pasar un poco desapercibido", dijo Griezmann.
El jugador nacido en Mâcon es un jugador único y sus diabluras en la banda izquierda han llevado el terror a sus marcadores en este torneo. Su entrenador Francis Smerecki solo tenía palabras de elogio tras el choque ante Austria: "Es un tipo de jugador que no teníamos. Un poco 'español', que nos da técnica y precisión de cara a puerta". Griezmann, cuyo juego se asemeja al del flamante fichaje del Manchester City FC David Silva (solo cuatro centímetros más alto) está disfrutando de su estancia en España. "Me siento genial en la Real Sociedad. Es mi segunda familia. El año que viene gozaré jugando en la Liga, en la mejor competición nacional del mundo".
Griezmann, que describió su partido ante Austria como un "encuentro decente" y se ha puesto el listón muy alto. Pensamos más en la semifinal que en la clasificación para la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA. Ahora queremos llegar a la final y ganarla porque jugamos en casa", comentó el jugador a UEFA.com. Para ello, Francia cuenta con el talento de este rubio que logró marcar en su primer partido con los sub-19 (ante Ucrania el 4 de marzo de 2010) y en su debut con la Real. "Sería un sueño una final contra España, pero cualquier final es un sueño", reconoció Griezmann.