McCarey, con ganas de medirse a España

Aaron McCarey describió el logro de la República de Irlanda de alcanzar las semifinales del Campeonato de Europa Sub-19 de la UEFA como "la mejor noche de mi vida", y espera tener otra noche para recordar cuando se enfrenten a España.

Aunque su selección sufrió durante gran parte de su último encuentro en el Grupo A ante Rumanía, logró obtener un empate sin goles en Berceni que dio a los irlandeses el pase a las semifinales, donde se medirán ahora a la cuatro veces campeona España. "Cuando empezamos la fase de clasificación en octubre, nadie confiaba en que llegásemos a semifinales. Es un maravilloso logro para este grupo de chicos", explicó el portero del Wolverhampton Wanderers FC.

McCarey tiene gran parte de culpa del éxito de Irlanda hasta ahora, ya que en la primera jornada logró mantener la ventaja de 2-1 ante Grecia gracias a una impresionante parada tras un disparo de Giorgos Katidis, mientras que ante Rumanía el martes fueron varias intervenciones de mérito por su parte las que valieron a su equipo el empate ante la anfitriona. "Mi trabajo es estar en el sitio adecuado en el momento adecuado, y afortunadamente ese fue el caso en nuestro último partido. Supongo que no esperábamos estar bajo tanta presión como ocurrió en ese partido. Por suerte pude ayudar al equipo, pero puede que en otra ocasión las cosas no vayan tan bien", dijo el jugador irlandés.

"Gracias a nuestro entrenador de porteros, que estaba en las gradas, supe lo que estaba pasando en el otro partido del grupo entre la República Checa y Grecia. Sabíamos que ese partido podía afectar a nuestras opciones de clasificación, así que al conocer el marcador, pude gritar a mis compañeros 'Vamos bien chicos, el tiempo está con nosotros. No hagáis nada estúpido, vamos a ir a lo seguro y todo irá bien'", añadió.

Los hombres de Paul Doolin hicieron justo eso, y aseguraron un gran logro que McCarey nunca podrá olvidar. "Sé que no ganamos, pero cuando escuché el pitido final, sentí la mejor sensación que he sentido jamás en mi vida. Fue de largo el mejor partido en el que he jugado en mi carrera hasta ahora. Sabíamos antes del partido que muy probablemente si dejábamos nuestra portería a cero estaríamos en la siguiente ronda, y estamos encantados de haberlo hecho", comentó el guardameta.

El ex portero del Monaghan United FC desea que la aventura de su selección continúe en Rumanía, e insiste en que "cualquier cosa puede ocurrir" ante el equipo de Ginés Meléndez cuando ambos equipos se enfrenten en Chiajna el viernes por la tarde. "La verdad es que estaremos muy decepcionados si no vencemos a España. Aunque son un equipo fuerte, no les tenemos ningún miedo, ¿qué hay que temer? Hemos recorrido un largo camino para llegar aquí, y para nosotros España es sólo un nombre. Va a ser un duelo de once contra once durante 90 minutos", sentenció.