Dahlin piensa en positivo

Johan Dahlin no puede olvidar la última vez que Suecia jugó ante Serbia en partido oficial. El guardameta de 22 años estaba allí cuando Serbia dio la vuelta al 3-0 conseguido por los suecos en el partido de ida de los play-off de clasificación y se metió en la fase final del Campeonato de Europa Sub-21 de la UEFA de 2007 tras un 5-0 en el partido de vuelta.

Recuerdos dolorosos
El recuerdo es peor si Dahlin piensa en que el partido de vuelta fue en su lugar de nacimiento, en Trollhattan. El guardameta fue remplazado en el descanso después de haber concedido tres goles en 26 minutos. "Todavía me acuerdo de ese partido. Se trataba de un gran encuentro, un play-off final para estar en la fase final del torneo, y nosotros caímos 0-5 en casa, en mi casa. No me gustó nada", comentó el portero sueco.

''Adelante''
Dahlin no es el único miembro del conjunto sueco que repite encuentro. Pontus Wernbloom y Marcus Berg también estuvieron allí junto con Mikael Lustig, Mattias Bjärsmyr y Ola Toivonen, estos últimos por entonces suplentes. Pero el resultado afectó más al joven portero del FC Lyn Oslo: "Me costó mucho tiempo superarlo pero ahora hay que seguir adelante".

Tranquilo
Dahlin estuvo hablando en el hotel de la selección sueca en Bastad la tarde previa al último encuentro del Grupo A. Normalmente la prensa quiere acercarse al jugador estrella de cada equipo pero esta vez los jugadores menos perseguidos fueron los que centraron la atención de los medios. Pero el guardameta sueco tiene suficientes méritos como para se considerado un jugador clave: el nº1 se ha consagrado como el primer portero en el club Noruego y se ha sido convocado por primera vez por la absoluta en un amistoso ante Estados Unidos el pasado enero. "Estoy tranquilo. Trato de no hacer las cosas más complicadas de lo que deben ser", comentó Dahlin.

Filosofal
Esta calma tiene un gran valor teniendo en cuenta que hoy martes Suecia se mide a Serbia. La selección anfitriona necesita un empate para pasar a semifinales y Dahlin mantiene la cabeza fría para el que puede ser el último partido. Sólo ha sido batido en tres ocasiones, dos de ellas tras los excepcionales disparos de Sergei Kislyak y de Mario Balotelli y el último después de que Robert Acquafresca finalizara espectacularmente de cabeza. "Fue duro ya que detuve cuatro claras ocasiones de gol y me metieron tres. Pero la verdad es que fueron grandes disparos ante los que no pude hacer nada. No los considero errores, ahora tengo que pensar en detener los siguientes. No quise pensar más en Italia porque no era el siguiente encuentro", comentó Dahlin que tiene toda su mente puesta en el partido ante Serbia.