1989: Doris Fitschen
domingo, 12 de octubre de 2008
Resumen del artículo
Doris Fitschen fue la capitana de la selección alemana a la que llevó a la vanguardia del fútbol europeo.
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Cuerpo del artículo
Como capitana de la selección alemana a la que llevó a la vanguardia del fútbol europeo, Doris Fitschen es conocida por muchos como la Franz Beckenbauer de 'Frauenfussball'.
De hielo en la pista, técnicamente dotada, llevó a su selección a su primer título europeo en 1989 y tras tres títulos más, logró una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de 2000. Quizás aún más importante, Fitschen se convirtió en el primer verdadero icono en el fútbol femenino en Alemania, ayudando a que su selección tuviera parte del reconocimiento que hasta ese momento era sólo de los hombres. "Tuve una gran carrera, con la oportunidad de ser parte del desarrollo del deporte desde sus primeras etapas con los primeros éxitos. El hecho de haber promovido el fútbol femenino en Alemania es un buen logro personal. Nadie ha llegado tan lejos como yo", declaró a UEFA.com.
Al igual que muchas de sus compañeras, el ser una feroz competidora es uno de los distintivos de esta rubia, algo que aprendió cuando jugaba con los niños en su ciudad natal, Zeven. Pero por el momento, una lesión la obligó a retirarse en 2001, Fitschen había recorrido un largo camino, desde sus primeros toques de balón había pasado a jugar al fútbol en un gran país como Estados Unidos. "La oportunidad de jugar al fútbol profesional en los Estados Unidos fue impresionante. De repente empezaba a ganar dinero con el fútbol y no tenía que hacer cualquier otra cosa excepto ir a entrenar o jugar ante 8.000 o 10.000 personas cada semana. En mi país no iban más de 500 aficionados a los partidos", explicó.
No fue sólo en su patria donde abrió nuevos caminos. Como capitana de las Philadelphia Charge, marcó el primer gol de la historia de la WUSA, un momento histórico que trata de minimizar con su típica modestia: "Voy a recordar siempre ese gol, pero como la mayoría de los que he marcado. Es uno de los penaltis que peor he tirado, pero muchas veces también necesitas que te acompañe la suerte". La suerte por sí sola, sin embargo, no cuenta para los tres títulos de liga alemana, tres Copas de Alemania y una Supercopa que Fitschen consiguió antes de cruzar el Atlántico. También hay que resaltar sus 144 internacionalidades y el premio que le concedió la UEFA por su contribución a este deporte.
Continua sirviendo al fútbol a día de hoy, después de haber cambiado su papel al marketing en la Federación Alemana de Fútbol, por lo que su perspectiva ha cambiado totalmente y también es seleccionadora del equipo nacional femenino. "Cuando era jugadora, viajaba a un partido internacional, estaba sobre el terreno de juego los 90 minutos y después me volvía a casa. Nunca he pensado en lo que se tardaba en organizar todo eso. Es realmente difícil hacer todo el trabajo para los aficionados dentro del estadio y tener todo listo para que se pueda retransmitir el partido". La Copa Mundial Femenina de la FIFA 2011 se jugó en Alemania. Toda una celebración en este deporte que sufrió un gran empuje hace dos décadas gracias al equipo de Fitschen y compañía.