Un punto de oro

Por Cristina Lloret

El Villarreal, con cuatro puntos antes del choque, sólo necesitaba uno para lograr la clasificación directa a los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA. El ‘submarino amarillo’ salió al terreno de juego totalmente mentalizado y ni el ambiente caldeado por los más de 25.000 aficionados del equipo líder de la Liga serbia, pudo con la ambición europea de los castellonenses. Comenzaron ganando tras un gran gol de  Santiago Cazorla y vieron como el FK Partizan les empataba de penalti tras una clara mano de Juan Manuel Peña.

Problemas para Pellegrini 
Manuel Pellegrini, técnico del Villarreal, tuvo que tirar de la cantera para poder formar el once inicial, pese a esto no cambió su filosofía de juego ofensiva. Los jóvenes jugadores César Arzo, Xisco Nadal, José María Cases, Marcos García y Rubén González llegaron a Belgrado dispuestos a llevarse la victoria y que las numerosas e importantes bajas, hasta diez, se notaran lo menos posible. Román Riquelme, lesionado, igual que Sebastián Battaglia y José Mari Romero, sancionado por la expulsión que sufrió ante el S.S. Lazio, fueron las más notables.

Con ganas de anotar pronto
Los jugadores del Villarreal comenzaron bien, con la posesión del esférico, pero pese a esto el Partizan puso el peligro en la portería de José Manuel Reina. En el minuto 10 el delantero del conjunto serbio, Pierre Boya, tuvo dos claras ocasiones que el guardameta supo anular con gran habilidad.

Cazorla marca las diferencias
En los momentos que más necesidad estaba pasando el equipo de Pellegrini llegó el gol tras una jugada de contragolpe. Un gran tanto con dos protagonistas claros. Xisco Nadal que creó el pase en profundidad y Cazorla que definió magistralmente tras la salida del guardameta Milivoje Cirkovic. El Partizan no podía romper la línea defensiva del submarino amarillo que aguantó el marcador a su favor hasta el descanso.

Guayre lo intentó
El segundo tiempo comenzó con un breve parón a consecuencia de las numerosas bengalas que portaban los aficionados del Partizan. Tras la reanudación el Villarreal comenzó muy fuerte, con todos los jugadores que estaban muy atentos para mantener la ventaja e intentaron sentenciar en diversas jugadas. Y es que el delantero canario tuvo por tres veces en sus botas el tanto de la tranquilidad tras varios contraataques. El susto lo dio Xisco, que sufrió un fuerte impacto del portero Kralj. El canterano abandonó momentáneamente el terreno de juego en camilla pero por fortuna no pasó de un golpe sin más consecuencias.

El empate tras una pena máxima
Era el minuto 63 cuando se pitó la pena máxima tras unas manos claras de Peña en el área del Partizan. Reina, gran especialista en parar penas máximas, apunto estuvo de lograrlo ante Ivan Tomic, pero tras bloquear el balón a primera instancia, este se coló por debajo de su cuerpo. Tras este duro golpe, la defensa vivió momentos difíciles y se aplicó a fondo para frenar los ataques de los serbios jaleados por su calurosa afición. Por otra parte, Arruabarrena no podrá jugar el próximo partido europeo tras ser amonestado con la cartulina amarilla.

La clasificación asegurada
El conjunto español tuvo mucho sufrimiento en los últimos veinte minutos del choque, pues el Partizan tuvo numerosas y claras oportunidades de marcar. Los cuatro últimos minutos del tiempo añadido, sin embargo, se vivieron con gran tranquilidad, ya que los dos equipos daban como positivo el empate que clasificaba a ambos. Finalmente, se lograba un importante punto. El Villarreal había superado el llamado infierno balcánico.