Gian Piero Gasperini, sobre el triunfo de la Atalanta en la Europa League y el reencuentro con Carlo Ancelotti

Gian Piero Gasperini es la prueba de que la perseverancia, la dedicación y la ambición implacable acaban cosechando sus frutos. El italiano de 66 años, dos veces elegido Entrenador del Año en la Serie A, consiguió por fin un trofeo para su equipo cuando su Atalanta derrotó al Bayer Leverkusen por 3-0 en la final de la UEFA Europa League 2024 en Dublín, asegurando también el primer trofeo europeo de la historia para 'La Dea'.

Gasperini comenzó su carrera como entrenador en las categorías inferiores de la Juventus hace 30 años y ahora se enfrentará al hombre que ocupó el banquillo durante parte de su etapa en Turín, Carlo Ancelotti, cuando la Atalanta se enfrente al campeón de la UEFA Champions League, el Real Madrid, en la Supercopa de la UEFA en Varsovia el 14 de agosto.

El camino de la Atalanta hacia la Europa League y su condición de tapado

"Ha sido un largo camino en la Europa League. Desde el primer partido en Lisboa, demostramos nuestras cualidades y jugamos al máximo de nuestras posibilidades. Era una competición de alto nivel, y ganarla así fue un gran logro para nosotros. Al principio no éramos favoritos contra el Liverpool, y quizá tampoco contra el Sporting CP. Todo el mundo pensaba que ganarían, y al final nos enfrentamos a ellos cuatro veces [fase de grupos y luego octavos de final]. Debo decir que el hecho de no ser favoritos nos favoreció en cierta medida, sacó lo mejor de nosotros".

"No sé si fuimos uno de los mejores equipos, pero sí muy buenos. Sin duda fuimos los mejores de la competición, en parte por los resultados que obtuvimos: 3-0 contra el Marsella, 3-0 contra el Liverpool, 3-0 contra el Bayer Leverkusen. También hubo otros partidos, como nuestros duelos contra el Sporting, al que ganamos dos veces y empatamos otras dos. Hicimos justicia a lo largo de toda la Europa League, y lo más satisfactorio es que este tipo de competiciones son realmente inciertas -un solo mal día te puede dejar fuera-, pero está ampliamente reconocido que merecimos ganar el trofeo".

Sobre lo que significa para él y para la Atalanta ganar el trofeo

"Lo es todo para la historia de la Atalanta. Y para mí también, es el primer trofeo europeo que gano. Ganar, sobre todo en Europa, es algo que la Atalanta no había hecho nunca en su historia, ni muchos de nosotros en el club. Y la forma en que lo hicimos nunca se olvidará en este club. Hacia el final de la temporada íbamos en ascenso, ganando muchos partidos seguidos, incluso en la Serie A. Tuvimos grandes actuaciones tanto en liga como en copa, lo que nos permitió llegar a [dos] finales y terminar en puestos de la Champions League en la Serie A".

"Luego vino la derrota de una semana antes [Leverkusen] en la final de la Coppa Italia contra el Juventus, en un contexto de muchos partidos buenos, tanto en resultados como en rendimiento. Quizá el hecho de que no jugáramos a nuestro mejor nivel en ese partido contra el Juventus nos dio la fuerza, la concentración y el enfoque necesarios para jugar contra el Leverkusen, que fue el partido tan reñido que muchos predijeron. Aquella final de la Coppa Italia fue vital para que tuviéramos el rendimiento que tuvimos".

Sobre cuándo se dio cuenta de que la Atalanta iba a ganar la Europa League

"Cuando llegó el tercer gol de [Ademola] Lookman, porque incluso cuando íbamos ganando 2-0, éramos conscientes de la capacidad del Bayer para dar la vuelta a un partido, como había hecho tantas veces a lo largo de la temporada. Cuando llegamos al 3-0, nos permitimos creer que habíamos hecho lo suficiente para ganar la Copa. Obviamente, la sensación de éxito fue enorme. Este verano lo disfrutamos aún más, porque la Atalanta fue uno de los únicos equipos italianos que lo hizo bien en Europa este año; en cierto modo, representábamos a Italia. Pero también fue un logro, porque demostró que un club pequeño o mediano como la Atalanta podía llegar hasta el final".

Sobre su trayectoria como entrenador en la Atalanta, a la que llegó en 2016.

"En los últimos seis años nos hemos metido cuatro veces en la Champions League. Esta temporada será la cuarta vez. Nos hemos convertido en un jugador importante en el panorama del fútbol europeo, y eso es muy diferente de lo que era hace ocho años. Hemos hecho este viaje juntos y, desde luego, muchos jugadores han cambiado en este tiempo. La plantilla es casi irreconocible. Hemos mudado de piel al menos tres veces, pero siempre hemos mantenido nuestro alto nivel de determinación y competitividad. Eso es gracias a todo el sistema que hay aquí: desde el cuerpo técnico hasta los jugadores, el club, el ambiente y la propia ciudad. Todos estos factores contribuyen a que el equipo funcione".

Sobre enfrentarse al Real Madrid en la Supercopa

"Será una ocasión extraordinaria para la Atalanta, para Bérgamo, para la historia del lugar. Jugaremos contra el club más laureado del mundo, contra el equipo que más veces ha ganado en el mundo. Jugar una final así, por este trofeo, contra un club tan importante, habría sido impensable hasta hace poco. Hay un enorme sentimiento de orgullo. También es una sensación de querer estar ahí, de querer ir y hacer una gran actuación y mantenernos firmes contra un club que históricamente es el equipo más fuerte. Es un momento realmente inspirador para todo Bérgamo, para todos los aficionados. No cabe duda de que es un punto culminante, quizá el más alto de la historia de la Atalanta".

Sobre Carlo Ancelotti, con quien trabajó en la Juventus

"Está claro que Carlo es una institución en todo el mundo. Lo ha hecho con muchos clubes diferentes, y está haciendo cosas increíbles en el Real Madrid. Lo hizo antes con ellos y lo está haciendo de nuevo. Está claro que para nosotros, al menos para mí, será muy especial jugar contra él en esta final, teniendo en cuenta que hace 30 años yo entrenaba al equipo juvenil de la Juventus y él entrenaba al primer equipo. Eso fue hace muchos años, pero será maravilloso volver a encontrarnos en esta final".