Experiencia "memorable" para Gibraltar

Gibraltar comenzó su participación por segunda vez en la Eurocopa de Fútbol Sala de la UEFA la semana pasada al entrar en el Grupo A de la ronda preliminar de la Eurocopa de Fútbol Sala de la UEFA de 2016.

Los resultados no han sido buenos para el equipo de Peter Moreno, con derrotas ante Grecia (3-0), la anfitriona Bulgaria (3-1) y Dinamarca (9-1) en Blagoevgrad, pero esta segunda competición oficial tiene un valor incalculable para la selección de la peñón. El portero Julian Fortuna comentó a UEFA.com todo sobre la "emocionante y memorable semana" de los gibraltareños.

Un sueño hecho realidad…
"El sueño de un futbolista es siempre el de representar a su país al más alto nivel. El Grupo A era duro, Bulgaria, Grecia y Dinamarca son grandes países comparados con Gibraltar, que tiene 30.000 habitantes. Sin embargo, el equipo llegó a la fase preliminar con el objetivo de lograr resultados positivos y de intentar clasificarnos para la ronda principal de marzo".

Discursos motivadores…
"El día del primer partido ante Grecia fue muy emocionante para todos los implicados. Todos menos dos debutaban a nivel de la Eurocopa de la UEFA. Duane Robba y Jamie Pecino son los únicos supervivientes del equipo que viajó a Francia en 2013 para los clasificatorios de 2014. El entrenador Peter Moreno nos dio una charla muy emocionante, deseando lo mejor a todos los jugadores en esta maravillosa aventura en la que nos embarcábamos. Todos los jugadores implicados se emocionaron con sus palabras y se mostraron listos para enfrentarse a los griegos. El capitán Christian Sanchez dio otro discurso muy emocionante justo antes de salir a jugar…"

Escuchando el himno…
"A medida que saltábamos al césped, a pesar de la poca gente que había, los jugadores estábamos nerviosos. Cuando empezó a sonar el himno nacional de Gibraltar me di cuenta exactamente de dónde estábamos y estábamos muy nerviosos. Intenté mantener las lágrimas. Mi sueño, un jugador aficionado que representaba a su país al más alto nivel, se había convertido en realidad. Perdimos 3-0 ante Grecia, encajando dos goles en los últimos cinco minutos, pero sentimos que nuestra gente estaría orgullosa de nosotros tras un buen partido ante Grecia".

Gran ovación...
"Al día siguiente nos medimos a la anfitriona Bulgaria y vimos la gran multitud de gente que les apoyaba. Los nervios del primer día se habían esfumado y sabíamos que podíamos competir a este nivel. A los cinco minutos Gibraltar se puso por delante en el marcador, Ivan Robba hizo que todos explotáramos de alegría. A pesar de encajar tres goles en jugadas a balón parado luchamos y en los últimos compases del encuentro los búlgaros se asustaron un poco. El partido terminó 3-1 pero vimos como los aficionados locales se pusieron de pie y nos dieron una ovación. Gibraltar se había ganado el respeto del público presente en el pabellón. Otro gran momento para nuestra pequeña selección".

Un gol brillante...
"En el último encuentro ante Dinamarca sabíamos que nuestro rival intentaría conseguir una gran victoria para afianzarse en la primera plaza del grupo. Sin embargo nosotros queríamos continuar donde lo habíamos dejado… Desafortunadamente Dinamarca fue simplemente mejor: con más clase, eficiencia y suerte y al final perdimos por 9-1. A pesar de la derrota, Justin Collado marcó un gol brillante del que, tanto nosotros como él, quedamos encantados".

No somos una presa fácil…
"Aunque habíamos jugado bien los primeros dos encuentros, el último partido ante Dinamarca nos dejó algo decepcionados. Sin embargo, creo que podemos mirar nuestra actuación con orgullo. Demostramos que Gibraltar, da igual lo pequeño que sea, no es una presa fácil cuando hablamos del fútbol sala. Fue una semana memorable y los jugadores no pueden esperar a jugar de nuevo el torneo en dos años".